Para Marcelo
-¡Dispará! –dijo al verme apuntándolo con la pistola.
Supongo que llegué de improviso a la reunión y nadie esperaba mi presencia. En línea recta el tipo, a su lado otro que no logré identificar; detrás de ellos Micaela y un pequeño grupo circundándola.
No comprendo por qué fui, y mucho menos portando un arma, ni sabía utilizarla, pero recuerdo que mi brazo extendido no temblaba.
Parecía una fiesta sin música. Había murmullo proveniente del grupo, nada más, ese era el único sonido.
-¡Dispará, cagón! –Repitió el tipo.
Y lo hice.
Era mucho más alto que yo. Apunté a la cabeza, el tiro fue al cuello. Desde el agujero hecho por la bala pude ver a Micaela. Ella también me miraba.
Giré y salí. Nadie me siguió.
No sé quién era el tipo, ni Micaela, pero sé que ese es su nombre. Nuestras miradas no mostraron ningún tipo de sentimiento.
No sé por qué maté al tipo, por qué animó a que lo hiciera, por qué me trató de cagón, pero sé que eso no fue un detonante, no me movió a la ira, simplemente disparé.
De todo esto, lo que menos entiendo fue cómo, después de que la bala le traspasara el cuello, pudo quedarse de pie como para que yo viera a Micaela.
Quizá el que estaba al lado lo haya sostenido, pero ¿para qué?
Me molestan estos sueños donde no conozco a los personajes. Me molesta todavía más, soñar que no sé empuñar un arma. ®
Jeve
tremendo relato... texto de varias lecturas... síntesis... oficio... sí, ud. sabe disparar definitivamente palabras!! mi saludo, amiga.
ResponderEliminarMuy bueno tu relato , como siempre , algo me deja pensando.
ResponderEliminarSaludito
Cris//mujeresdesincuentay
Ah, la gran pregunta, ¿por qué soñamos lo que soñamos? ¿soñamos lo que deseamos hacer, o lo que jamás haríamos?
ResponderEliminarMuy buen relato.
Besos.
Me gusta el cierre del cuento con la queja del protagonista por sus inhabilidades en los sueños y las dudas que se plantea antes de develar que sólo se trababa de un sueño.
ResponderEliminarSaludos.
El enigma de lo onìrico.
ResponderEliminarBien escrito. con ritmo.
Un abrazo.
los sueños nos dejan la intriga de haber abierto una puerta, que luego cerramos con estrépito. Muy bueno! Lei algunas cositas de este blog y me encantaron volveré mas seguido!.clau
ResponderEliminarVengo de soñar, y me encuentro este sueño...me gusta la forma y el fondo...enhorabuena por el blog y su contenido...un abrazo de azpeitia
ResponderEliminar¡¡Muy bueno jeve!!
ResponderEliminarQue buen desarrollo del cuento y que final, es para dejar al lector con la boca abierta.
Un cariño.
mariarosa
Muy bueno. Me gusta mucho como escribís. En cuanto a los sueños...¿cuándo estamos "despiertos" y cuándo soñamos? Terrible pregunta, al menos para mí. Abrazo.
ResponderEliminarHe soñado que hago cosas que no se hacer.
ResponderEliminarHe soñado ser feliz.
A mamita!! palabras como balas! como siempre grato placer pasar!
ResponderEliminarUna historia dentro de un sueño y el disparo que en sí, habre mas dudas, si fue un sueño o realidad.
ResponderEliminarMe queda la espinita.
Un cariño.
Alejandro
Que bueno! Un cuento que nos hace pensar en lo que soñamos, excelente trama y buen final, los sueños..si uno pudiera descifrarlos.
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