No le crecieron branquias aquella noche, a pesar de sus ruegos a la luna, a pesar de los esfuerzos que hizo el mar por tocarlo y arrancarlo de aquella playa, que, en el atardecer frío, lo había visto nacer. Dos chicos le habían hecho el cuerpo de arena, escamas de caracoles y ojos con piedras pulidas de un color verde esmeralda. Cuando quedó solitario sintió que sus aletas se movían pero no le servían para llegar al agua. Lo dicho: rogó, imploró, ofreció sacrificios y cuando por fin el mar, en un lamento le dijo que no llegaría, él se entregó. El pez de escamas de caracol murió sin conocer el mar. Pero no lo hizo como cualquier pez, lo hizo como el mejor, como el más valiente de su especie, mirando a la muerte con su ojo esmeralda. ®
Ruma
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Despensa
Cuarto de Regalos
Para Jeve y Ruma
Para ti, que escribres...
Broten las palabras de tu espíritu al papel
y dejen huella
de tal modo que permanezcan vivas, eternas en la roca testimonio de tu luz
y fuego en la luz de las estrellas.
http://visionesdeojosabiertos.blogspot.com/
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Bello... poètico, lleno de imàgenes.
ResponderEliminarQue tengan un lindo fin de semana!!
Graciela
Que bonito.
ResponderEliminary un poco nostalgico, ademàs.
Muy logrado texto.
Un abrazo.
Que lindo Ruma.
ResponderEliminarLa idea, las imagenes, son los ingredientes para ser una poesía.Hermoso.
mariarosa
Precioso!!! lleno de entre letras, como siempre un placer!!!
ResponderEliminarUn placer pasearme por tus excelentes letras,
ResponderEliminarque disfrutes el fin de semana.
un abrazo.
Me quedo pensando en el niño (¿una niña, quizás ambos a la vez?) que esa noche se fueron a dormir dejando el balde y la palita para jugar en la arena en la entrada de una ignota casa alquilada en tiempos de vacaciones, soñando con el gran pez que ellos esa tarde crearon y nunca fue. Abrazo. Ya lo sabemos: el mar es bello, pero traicionero.
ResponderEliminarOooh me ha resultado hermosisimamente triste.
ResponderEliminarBesos desde un faro en mitad del mar
Mar (... La vendedora de humo)
tal vez el destino no siempre ofrece lo que deseamos.Aun así ,este pez,ve más allá con sus ojos color esmeralda,quiero a la hora de partir esos ojos.
ResponderEliminarGracias Marcelo.
shosha
la capacidad de encerrar tanta historia en apenas algunas palabras que lloran por ser texto. ¡Y vaya que lo son!
ResponderEliminar¡Excelente relato, Ruma!
Un saludo.
Rudy